¿Qué significa glorificar a Dios? ¿Es eso todo para lo cual estamos aquí? Michael Frost profundiza en cómo incorporar a Dios en sus actividades e interacciones diarias.
Preguntas para Discusión y Reflexión Personal
- Para ti, ¿qué es glorificar a Dios?
- ¿Cómo puedes incorporar los valores de Dios en tu vida?
El viejo catecismo dice que el principal propósito de la humanidad es glorificar a Dios y gozar de él para siempre. Es decir, es un catecismo muy antiguo— la Confesión de Westminster— pero no puedo mejorarlo. El propósito principal de la humanidad es glorificar a Dios, es reconocer que él es rey que reina, que gobierna, que está a cargo del universo y glorificarlo es entregarle más y más y más de tu vida bajo ese reinado, bajo esa regla. Lo que suena un poco agobiante pero si después, sigues el resto de la catequesis como dice: Y disfrutas de Él para siempre, lo que descubres es que nuestro propósito en la vida es entregarle todo lo que tenemos; tanto nuestros hábitos, nuestro estilo de vida, nuestros puntos de vista, nuestro entendimiento, nuestro intelecto, como también nuestro trabajo, nuestras aficiones, nuestros pasatiempos, nuestras relaciones. Entregarle esto bajo el reinado de Dios que, por así decirlo tomar los valores de Dios - la paz y la justicia y la reconciliación y la la belleza y la alegría y para infundir todos los aspectos de esos. Así que yo diría que Dios está realmente interesado en tu trabajo. Ya seas un constructor o un profesor o un sanador, él quiere que lo glorifiques adoptando sus valores y expresándolos a través de tu trabajo. Él quiere que bendigas la ciudad de la que eres. Quiere crear una mejor ciudad, traer paz y justicia a este mundo. Él quiere que disfrutes la belleza y la maravilla y la alegría que viene de glorificarlo. Así que en caso de que hayas pensado que glorificar a Dios y disfrutarlo para siempre se trataba de estar en alguna iglesia eternamente, reconsidéralo. En realidad es acerca del arte y belleza la pintura; se trata de la risa y las fiestas y comer. Se trata de trabajo y sanación y servir y dar. Se trata de todos los aspectos de la vida. Cualquier manera en la que estemos conectados o cualesquiera que sean las contribuciones que hacemos para fabricar un mosaico, un tapiz de gloria, que refleje el maravilloso reino de Dios.