10 Días: Muestra Día 1
La meta suprema del Cristianismo no es nuestra propia mejoría moral; es la gloria de Dios.
Muchos de nosotros crecimos con nuestros padres leyéndonos, fábulas, cuentos de hadas, u otros cuentos antes de dormir. Como niños, sabíamos que los cuentos no eran reales. Pero eso no era él punto. El propósito de estos cuentos era para enseñarnos valiosas lecciones. Los cuentos usaban imagenes de fantasia para ilustrar cómo el mundo funciona y para ayudarnos a vivir una vida mejor.
Muchos tratan al Cristianismo de una manera muy similar. Dicen que no importa si la historia de la vida, muerte y resurrección de Jesús es real. Todo lo que importa es que les mueve a ser mejores personas. Pero existen dos problemas al ver al Cristianismo de esta manera: 1) la Biblia nos dice que la verdad de la historia si tiene valor y 2) la Biblia también nos dice que no importa cuanto lo intentamos, verdaderamente no podemos ser buenas personas.
La meta suprema del Cristianismo no es nuestra propia mejoría moral; es la gloria de Dios. Pablo lo resume concisamente en 1 de Corintios 10:31 cuando escribe, “ En conclusión, ya sea que coman o beban o hagan cualquier otra cosa, háganlo todo para la gloria de Dios.”
Considera Esto
- Si la meta del Cristianismo no es él ser “bueno,” de dónde sacamos esa idea?
- Que crees que significa él dar gloria a Dios?
Tomar Acción
Toma tiempo intencional esta semana en el concepto de glorificar a Dios. Puedes comenzar viendo lo que la Biblia dice al respecto. Haz una búsqueda de versos relacionados con la gloria de Dios. Puedes también ir con otros recursos suplementarios, como comentarios bíblicos fiables o ir a un estudio de Biblia, para aumentar tu entendimiento.