¿Cuántos años tiene la tierra? ¿Cómo exactamente sucedió la creación? Las respuestas cristianas difieren.
Es probable que hayas oído hablar del debate de la tierra antigua y la tierra joven entre los cristianos. Dentro de esta controversia es clave el período de seis días de la creación en el libro del Génesis.
Veamos tres interpretaciones comunes de la historia de la creación del Génesis, evaluemos que tan importante es la cuestión para la fe cristiana y examinemos cómo una controversia similar fue resuelta hace varios cientos de años de una manera que cumple con los mandamientos de Cristo y del Apóstol Pablo con respecto a la unidad de los cristianos.1
Las tres interpretaciones básicas son el creacionismo de la tierra joven (YEC, por sus siglas en inglés), el creacionismo de la tierra antigua (OEC, por sus siglas en inglés) y los enfoques alegóricos.
El Creacionismo de la Tierra Joven (YEC)
La interpretación histórica del Génesis es que los siete días de la creación son siete períodos de 24 horas—como nuestros días actuales.2 Cuando se combina con una simple suma de los años en las genealogías de la Biblia, las matemáticas resultan en un universo de 6,000 años de antigüedad con la raza humana—a partir de Adán y Eva—que aparecen el día 6.3
Mientras algunos defensores del YEC intentan desarrollar pruebas científicas para una creación reciente (conocida como ciencia de la creación), otros ven toda la empresa científica con escepticismo.4 Los que rechazan la ciencia tampoco ven afirmaciones científicas de una tierra de 4.5 mil millones de años de edad como una teoría hecha para provocar que los cristianos duden de la Biblia o como una búsqueda imposible debido al pensamiento defectuoso de los seres humanos caídos.5
Los YEC afirman que una lectura natural de la Biblia indica que Dios quería que los lectores interpretan los días de la creación como períodos ordinarios de 24 horas. Dicho esto, cabe señalar que algunos YECs estarían de acuerdo en que la tierra parece ser muy antigua. Sin embargo, discutirían que Dios creó la tierra con una simple apariencia de edad, probablemente al igual que creó a Adán como un hombre maduro, y no un niño.
El Creacionismo de la Tierra Antigua (OEC)
Los OECs6 abogan por un relato literal del Génesis, pero interpretan la palabra “día” como una era o algún otro tipo de periodo de tiempo largo.7 Otro término utilizado para esta posición es el de “día-era.” Es decir, cada día significa una época de tiempo, muy parecido a lo que los ingleses podrían referirse como el “día de los pioneros” o el “día de los dinosaurios.”
La mayoría de los OECs cree que Dios sobrenaturalmente, creó el universo de la nada y que la cosmología del Big Bang proporciona un apoyo científico muy fuerte para esto. Estos OECs son “creacionistas progresivos” en el sentido de que ellos creen que Dios intervino sobrenaturalmente en el transcurso de los seis largos períodos de tiempo para crear las diversas plantas y las formas de vida animal (los “tipos” mencionados en el Génesis).
Los OECs se oponen a la evolución Darwiniana pero no necesariamente a la micro evolución (cambios menores dentro de una especie).8 Como los YECs, los OECs colocan un alto valor en la inerrancia bíblica. La mayoría de los defensores del OEC admitirá que una lectura natural de las versiones en inglés del Génesis conducen a una posición del YEC, pero también señalan que las Escritura apoyan una interpretación de una tierra antigua.9
Enfoques Alegóricos
Esta tercera categoría incluye a todos los cristianos que no creen que los días del Génesis significan periodos de tiempo de algún tipo. Sostienen que la Biblia no está pensada para ser leída como la historia o la ciencia.
Un grupo de cristianos que se denominan “creacionistas evolutivos” o “teístas evolucionistas” (TEs) creen que Dios creó la tierra con potencial para que la vida la desarrollara por métodos naturalistas. Los defensores de los TE caen en la categoría de no-literalistas.10
Históricamente, ha habido otros enfoques alegóricos que no están ligados a la ciencia o a la cuestión de la evolución Darwiniana. Uno de ellos es llamado el “enfoque analógico,” que sostiene que Moisés relató la historia del Génesis de manera que los siete días de la creación fueran paralelos a la semana laboral, con Dios descansando en el séptimo día.11
Doctrina Esencial
El que Dios haya creado el universo—a diferencia de alguna forma de auto creación sin causa—es una doctrina cristiana importante, junto con la del pecado original, el nacimiento de Jesús de una Virgen, la Trinidad, la expiación, la resurrección y la salvación por gracia mediante la fe. Estas creencias, entre otras, figuran en los distintos credos y la mayoría de las declaraciones doctrinales de las iglesias cristianas evangélicas.
Si las doctrinas indicadas anteriormente son primarias sobre lo que significa ser cristiano, la cuestión acerca de cuándo Dios creó tal vez es terciaria. Mientras las cuestiones terciarias a menudo separan las denominaciones cristianas de otras, la mayoría de los cristianos están de acuerdo en los temas primarios encontrados en los credos históricos.
Resolviendo el Asunto
En los primeros días de la Iglesia cristiana, este tipo de desacuerdos se resolvían mediante concilios de la iglesia. En épocas más recientes, dos de estos consejos compuestos por conservadores estudiosos de la Biblia abordaron la cuestión a mano. Tanto el Consejo de la Inerrancia Bíblica (Council of Biblical Inerrancy) y los líderes de la Iglesia Presbiteriana de América (PCA, por sus siglas en inglés) acordaron casi por unanimidad rechazar la inclusión de una tierra joven como criterios de infalibilidad.12
Tal vez queramos tomar una lección de un gran científico del siglo XVII, quien también era un cristiano devoto. Enfrentando una acalorada controversia—que dio como resultado su excomunión de la iglesia—sobre si la tierra era el centro del sistema solar (geocentrismo) o si giraba alrededor del sol (heliocentrismo), Galileo Galilei recurrió a lo que los teólogos denominan la "Doble Revelación" de Dios.
Esta doctrina, articulada en la Confesión Belga de los anteriores protestantes reformadores, dice que podemos conocer a Dios a través de 1) lo que vemos en el orden creado (revelación general) y 2) lo que Dios revela por medio de las Escrituras (revelación especial).13 Tanto los hechos de la naturaleza como las palabras de Dios tienen el mismo autor, argumentó Galileo, y por lo tanto ambas deben ser verdad. Esto requiere que nuestra interpretación de las Escrituras y nuestra interpretación de los hechos de la naturaleza trabajen juntos para informar a los demás.
Hoy en día, los cristianos no se dividen por el tema del heliocentrismo versus el geocentrismo. Parece una controversia pintoresca del pasado distante. Igual podría pasar con el conflicto actual sobre la creación de los días. A pesar de todo, algunos dicen, eventualmente tendremos la oportunidad de resolver esta cuestión preguntando a quien lo creó todo. Mi suposición es que, si esto es cierto, estar en la presencia de Dios hará que el tema parezca tan irrelevante que nadie recordará a hacerlo.